Do-ho Suh, ¿qué convierte a una persona en persona?

Quizá sea “espacio” el término que más ha marcado la vida y obra del escultor Do-ho Suh. El coreano reflexiona a través de sus impactantes composiciones sobre la individualidad, las fronteras tanto físicas como metafóricas de la propia personalidad.

“Todo comienza con una idea del espacio personal, cuál es su dimensión. ¿Qué convierte a una persona en persona y cuándo esa persona forma parte de un grupo?”, contaba Suh a la revista WSJ, que ademas le otorgó el premio a la innovación en el arte en 2013. Son estas preguntas de calado social y emocional que tienen su expresión en obras formadas por múltiples objetos que, reconvertidos en grupo y vistas desde una perspectiva macro, conforman un ente con significado propio. Tal es el caso de su “ejército de soldados” (y aquí entra también en juego el uniforme como parte de la identidad), un manto verde en medio del espacio urbano, o una malla de figuras humanas que ponen límites a la costa y que quizá sirva como crítica al fenómeno de la inmigración ilegal; humanos construyendo fronteras contra humanos.

Pero también analiza la relación entre el ser humano y eso que venimos llamando hogar, con espacios arquitectónicos situados en los lugares más recónditos o al límite de su propia estabilidad física… Una interesantísima (y un tanto onírica) visión de la escultura como método de comunicación que podéis ver en las imágenes bajo estas líneas, o en cualquiera de las múltiples exposiciones conceptuales que tienen lugar cada año en diferentes partes del planeta.